¿Cómo mejorar la eficiencia de tu sistema de calefacción sin cambiarlo?
Con la llegada del frío, mantener tu hogar cálido se convierte en prioridad. Sin embargo, muchas veces el consumo de energía se dispara y las facturas aumentan, incluso si tu sistema de calefacción no es muy antiguo. La buena noticia es que no necesitas cambiar todo el sistema para notar mejoras significativas: con algunos ajustes simples puedes optimizar su rendimiento, ahorrar energía y alargar su vida útil.
Mantén los filtros y conductos limpios
- Un filtro sucio obliga al sistema a trabajar más duro, consumiendo más energía.
- Revisa los filtros al menos una vez al mes en temporada de uso.
- Cámbialos cada 2-3 meses (o según indicaciones del fabricante).
- Si tienes calefacción por conductos, considera una limpieza profesional cada cierto tiempo.
Dato: un flujo de aire limpio mejora la eficiencia hasta en un 15%
Asegura un buen aislamiento en tu hogar
- De poco sirve una calefacción potente si el calor se escapa.
- Sella ventanas y puertas con burletes o silicona.
- Usa cortinas gruesas o térmicas. Asegúrate de que el ático y las paredes tengan buen aislamiento.
Dato: un hogar bien aislado puede reducir el consumo de calefacción hasta un 30%
Ajusta el termostato inteligentemente
- Baja la temperatura de 1 a 2 ºC: tu cuerpo apenas lo nota, pero tu factura sí.
- Instala un termostato programable o inteligente.
- Programa temperaturas más bajas cuando no estés en casa o mientras duermes.
Dato: cada grado menos puede ahorrar entre un 5% y 10% de energía
Purga los radiadores (si usas agua caliente)
Con el tiempo, los radiadores acumulan aire en su interior que reduce la eficiencia.
- Abre la válvula hasta que salga agua sin burbuja
- Hazlo al inicio de la temporada de frío
Resultado: un calor más uniforme en todo tu hogar
No bloquees salidas de aire o radiadores
Muebles, cortinas o alfombras que cubren los radiadores impiden que el calor circule.
- Asegúrate de que nada obstaculice las rejillas de ventilación
- Deja al menos 30cm libres alrededor de cada radiador
Mantenimiento regular
Un chequeo anual por un técnico puede detectar problemas ocultos como fugas, piezas desgastadas o un mal ajuste del sistema.
Beneficio: previenes averías costosas y mantienes la eficiencia máxima.
Aprovecha el calor natural
- Abre cortinas y persianas durante el día para dejar entrar la luz solar.
- Ciérralas en la noche para conservar el calor acumulado.
Conclusión
Mejorar la eficiencia de tu sistema de calefacción no requiere grandes inversiones. Con mantenimiento, aislamiento y pequeños cambios en tus hábitos, podrás disfrutar de un hogar cálido, gastar menos en energía y alargar la vida útil de tu sistema.