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Más del 76% de los españoles realizan un mantenimiento previo antes del encendido de la calefacción

● Los expertos de HomeServe recuerdan la importancia de realizar revisiones frecuentes en los sistemas de calefacción para evitar averías y accidentes

● La caldera es el sistema de calefacción con mayor penetración en las edificaciones actuales, presente en un 60% de los hogares, seguido de la bomba de calor (15,92%) y de la chimenea (11,76%)

 

Con la llegada de la primera ola de frío se intensifica el uso de las calderas y de otros sistemas de calefacción en los hogares. Según la empresa especializada en cuidado y mantenimiento del hogar, HomeServe, entre los usuarios que cuentan en su vivienda con sistemas de calefacción a través de caldera, más del 76% afirma haber llevado a cabo una revisión de mantenimiento antes del encendido anual. Además, de este estudio se desprende también que el 30% de los usuarios reconoce que su caldera le ha fallado en plena ola de frío. De ahí, la importancia de realizar un mantenimiento periódico de nuestra caldera para evitar averías y gastos extra que puedan arruinarnos el mes y dejarnos tiritando en los meses más fríos.

 

Y es que, según datos extraídos de la encuesta de HomeServe, en España, los usuarios suelen mantener encendida la calefacción entre los meses de noviembre y marzo, siendo más habitual en diciembre y enero (más del 90% de los hogares que tienen calefacción). En marzo, sin embargo, solo continúa encendida en el 62,98% de los hogares dotados con calefacción.

 

“Una revisión periódica realizada por profesionales expertos y autorizados nos dará tranquilidad en los meses más duros del invierno y evitará que tengamos que desembolsar en torno a 250€ si se produce una avería importante en nuestra caldera”, afirman los expertos de HomeServe. Al mismo tiempo recuerdan que, entre los problemas más comunes en las calderas, se encuentran la obstrucción de salidas de humos, la bajada de presión, el bloqueo en la bomba de recirculación, la rotura de la válvula de seguridad o problemas con la sonda de la temperatura.

 

Cabe destacar que, según los datos de la última encuesta realizada por la plataforma digital para la mejora del hogar, habitissimo, la caldera es el sistema de calefacción con mayor penetración en las viviendas de los españoles, presente en un 60% los hogares, 43 puntos por encima de la bomba de calor, el siguiente favorito en la tabla, elegido por el 15,92% de los usuarios. Por detrás se sitúan la chimenea, con el 11,76% y los emisores térmicos con el 9,69%. A la cola de las alternativas, los acumuladores de calor, que representan el 3,11% de los sistemas de calefacción.

 

REDUCIR EL GASTO EN CALEFACCIÓN

 

Además de realizar un mantenimiento periódico, desde HomeServe comparten una serie de consejos para reducir el gasto en calefacción y conseguir una mejor eficiencia energética. “Una buena opción sería 19º cuando no hay nadie dentro de la vivienda y 22º cuando nos encontramos en casa”, matizan.

 

Así, los expertos de HomeServe recomiendan establecer una temperatura estable, que nos permita mantener caldeada la vivienda y regularla en función de si estamos o no en casa. En este sentido según los encuestados, el 55,02% afirma mantener la temperatura de la calefacción de sus viviendas entre 21º y 22º, mientras que el 20,42% que la regula entre 19º y 20º, el 19,03% entre 23º y 24º, el 4,50% entre 25º y 26º y, por último, el 1,04% a más de 27º.

 

Por ello, además del mantenimiento, es fundamental purgar los radiadores antes de encenderlospues si se acumula el aire, su eficiencia será menor y el calor no se distribuirá igual por todo el sistema. En el caso de que nuestra vivienda sea antigua, habrá que comprobar la eficiencia de los aparatos y, si no cumplen los requerimientos ni las medidas de seguridad necesarias, sustituirlos por unos y más sostenibles”, indican.

 

Asimismo, es conveniente revisar la temperatura de la propia caldera. Si esta no tiene un diferenciador de agua que permita establecer una temperatura para la calefacción y otra para el agua corriente, la temperatura deberá situarse entre los 50º y los 55º. En el caso de que la caldera si cuente con diferenciador, el agua corriente deberá estar a 45º y la de la calefacción a 55º.

 

“Con un correcto y periódico mantenimiento y estos pequeños hábitos, conseguiremos que nuestro sistema de calefacción sea más eficiente y, en última instancia, más respetuoso con el medio y también con nuestro bolsillo”, concluyen.

 

Experto en reparación de calderas

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